Aumentar la eficiencia energética de los edificios, infraestructuras y transporte es una forma realmente efectiva de evitar emisiones de dióxido de carbono (CO2).
Algo muy necesario, teniendo en cuenta los últimos datos recogidos por el Informe Anual del Estado del Clima, elaborado por más de 400 científicos de 60 países en coordinación con la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EEUU).
Según este estudio, el pasado 2017 se logró todo un récord en la emisión de gases de efecto invernadero. Un hito nada halagüeño para la humanidad ya que en 2017 la concentración media mundial de dióxido de carbono en la superficie de la Tierra en 2017 fue de 405 partes por millón (ppm), es decir, 2,2 ppm más que las registradas en 2016.
Se trata de la mayor concentración de gases de efecto invernadero de la que se tiene constancia, desde que se tienen registros modernos de medición atmosférica.
¿Por qué es preocupante el aumento de emisiones de CO2?
Se estima que, un incremento de emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera por la acción humana puede conducir a un aumento de la temperatura global terrestre.
De hecho, uno de los datos más llamativos del informe es que la tasa de crecimiento global de dióxido de carbono casi se ha cuadruplicado desde principios de la década de 1960.
Este incremento coincide con el aumento de las temperaturas: el año 2016 fue el año más caluroso de la historia moderna, 2015 fue el segundo más caluroso y 2017 el tercero.
El incremento de la temperatura terrestre puede dar lugar a consecuencias finales difícilmente cuantificables y predecibles (aumento del nivel del mar, desplazamientos de especies, desaparición de especies, deshielo de los polares…).
Cuando el efecto invernadero se convierte en un fenómeno con consecuencias negativas para la vida planetaria, se suele hablar de cambio climático.
¿Qué puede hacer la eficiencia energética para frenar el cambio climático?
Mejorar la eficiencia energética es una medida fundamental para reducir la tasa de emisiones de gases de efecto invernadero.
¿Por qué? La combustión de este tipo de combustibles fósiles (carbón, gasóleo, gas natural….), muy utilizados en edificios, infraestructuras y transporte, genera gases como dióxido de carbono, monóxido de carbono, etc. Estos gases contribuyen a generar y potenciar el efecto invernadero, la lluvia ácida, la contaminación del aire, suelo y agua.
Por ello, si a través de la eficiencia energética se logra reducir drásticamente el porcentaje de energía que se desperdicia en instalaciones consumidoras de energía, se evitaría que millones de toneladas de gases contaminantes llegasen a la atmósfera.
Conscientes de esta situación, la Unión Europea se ha fijado objetivos de clima y energía para 2020, 2030 y 2050, entre los cuales figura una mejora en los niveles de eficiencia energética.
Objetivos para 2020:
- Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero un 20%, como mínimo, respecto a los niveles de 1990
- Obtener un 20% de la energía a partir de fuentes renovables
- Mejorar la eficiencia energética en un 20%.
Objetivos para 2030:
- 40% de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero
- Al menos 27% de energías renovables
- Aumento de la eficiencia energética en un 27-30%
Objetivo para 2050:
- 80-95% de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero respecto a los niveles de 1990
Mejorar la eficiencia energética de edificios contribuye a alcanzar estos objetivos y, además, supone un triple beneficio para las personas: se mejoran las condiciones de habitabilidad del edificio, se reduce el importe de la factura energética y aumenta el valor del inmueble.
¿Podemos ayudarte a mejorar la eficiencia energética de tu hogar o empresa? En Remica Servicios Energéticos somos expertos en la gestión energética de instalaciones térmicas y ofrecemos ahorros energéticos garantizados por contrato.
Si quieres saber cómo te puede ayudar una empresa de servicios energéticos como Remica a ahorrar energía sin renunciar al confort, te recomendamos el artículo ¿Qué son las empresas de servicios energéticos?
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